COMO AGUA PARA CHOCOLATE
Y así como un poeta juega con las palabras, así ella jugaba a su antojo con los ingredientes y con las cantidades, obteniendo resultados fenomenales». No siempre tenemos a mano los ingredientes de la felicidad. Tita lo había aprendido desde pequeña, cuando crecía en la cocina con Nacha y se le negaba toda posibilidad de vida propia desde su nacimiento. Pero lo que también aprendió Tita es que los ingredientes no son lo más importante para cocinar un buen plato, sino todo el amor con que seas capaz de hacerlo. Pero Encuadernación: Rústica Colección: Best Seller Tita se dio cuenta de que sus platos no solo tenían el poder de deslumbrar por sus sabores y texturas

EPIFANÍA EN EL DESIERTO
DIBUJOS DE HIROSHIMA
TÚ
SIRA
SÓLO NECESITO UN GATO
POBRES DIABLOS
NUNCA JAMÁS
NOCHES BLANCAS
MI PERRO Y YO
MUJERES DEL ALMA MÍA 

